Definición
Un planeta terrestre con atmósfera tenue es un cuerpo rocoso rodeado por una envoltura gaseosa muy reducida. Esta envoltura limita el transporte de calor, el movimiento de materia y el funcionamiento dinámico, creando un entorno seco y débilmente aislado.
Estructura interna
El interior está organizado en un núcleo metálico, un manto silicatado y una corteza sólida. Las propiedades mecánicas varían gradualmente entre estas capas, generando movimientos internos lentos y deformaciones superficiales limitadas.
Envoltura atmosférica
La atmósfera consiste en una fina capa de gases pobres en vapor de agua. Su baja densidad reduce el aislamiento, atenúa la erosión eólica y produce un régimen térmico determinado principalmente por la radiación directa y la emisión superficial.
Superficie y dinámica
La superficie está dominada por rocas modificadas por el viento, depósitos de polvo y huellas de flujos antiguos o de corta duración. La dinámica depende de los contrastes térmicos y genera vientos locales con marcadas variaciones estacionales.
Evolución
La evolución deriva de la pérdida progresiva de los gases originales, la disminución de la actividad interna y la interacción continua con la radiación. Esto conduce a un debilitamiento de la atmósfera y a una creciente sequedad superficial.
Limitaciones e interacciones
La atmósfera tenue limita la protección contra partículas energéticas, reduce la estabilidad del agua superficial y favorece la rápida dispersión de partículas finas. Sin embargo, las interacciones entre suelo, hielo y gas siguen siendo estructurales para el paisaje.